En ocasiones, sufrimos molestias o dolor en alguna parte de nuestro cuerpo y cuando tomamos la decisión de visitar al especialista, descubrimos que ya es demasiado tarde. ¿Te ha ocurrido?
Algo que ocurre especialmente cuando se trata de dolores articulares y musculares. No visitamos al fisioterapeuta porque, debido al ritmo de vida que llevamos, estresante y a la vez sedentario (cóctel explosivo que nos ocasiona todo tipo de problemas de salud en general y articulares en particular) damos por hecho que es lo normal y nos acostumbramos a convivir con ello.
Sin embargo, precisamente por su carácter inevitable y cotidiano, las molestias musculares que nos duelen, deben ser tratadas por un profesional para, no solo ponerles solución, sino evitar que se conviertan en algo peor y, en muchas ocasiones, crónico.
Por eso, por si aún no crees en la prevención como remedio de multitud de enfermedades, en este blog, te aportamos 5 razones (aunque hay muchas más) para que visites a tu fisioterapeuta al menos una vez al año y comiences a creer en la medicina preventiva como solución a problemas graves de salud que se desencadenan a medio y largo plazo.
- Nuestro cuerpo pierde movilidad en músculos y articulaciones a diario
Simplemente por las actividades que llevamos a cabo en nuestro día a día, todos nuestros músculos y articulaciones van perdiendo movilidad.
Con un mínimo tratamiento de fisioterapia preventiva puedes ralentizar significativamente ese proceso de pérdida de movilidad en tu cuerpo e impedir que llegue a producir dolor.
- Nos automedicamos enmascarando el dolor sin solucionar el problema
Los medicamentos (antiinflamatorios y analgésicos) empleados para tratar dolores musculares y articulares en realidad no solucionan la dolencia, simplemente atacan de manera momentánea el dolor, reproduciéndolo tiempo después y en ocasiones creando un efecto rebote difícil de revertir cuando se abandona la medicación.
- Los dolores agudos que no son tratados a tiempo se transforman en crónicos
Relacionado con el punto anterior, si soportamos un dolor eventual que tratamos como algo inevitable y no le damos la importancia que merece, esa molestia que comenzó como algo inofensivo puede ir a más y convertirse, con el tiempo, en algo crónico debido al desgaste y al maltrato al que hemos ido sometiendo a esa parte determinada de nuestro cuerpo.
- Lesiones que pasan inadvertidas pueden ser difíciles de solucionar con el tiempo
Muchos pacientes, por su experiencia anterior, por lo que les aconsejan los demás o por casos clínicos que encuentran en internet, se auto diagnostican una determinada enfermedad cuando en realidad tienen otra.
Así, podemos creer que tenemos una contractura muscular cuando, en realidad, lo que presentamos es una microrrotura fibrilar. Por eso, si dejamos que estas dolencias se alojen en nuestro sistema muscular, pueden ser más difíciles de solucionar en el futuro.
- ¡Nada duele lo normal, lo normal es que no duela nada!
No debemos tomarnos el dolor como algo cotidiano. El dolor es una alerta que nos envía nuestro cuerpo para informarnos de que algo no va bien.
Ya sea por enfermedad, por una respuesta al estrés o porque sufrimos de alguna lesión, es preciso tomar conciencia del problema y tratar de ponerle solución cuanto antes.
En MovRehabilitación contamos con un amplio grupo de especialistas fisioterapeutas que te ayudarán sea cual sea tu caso. ¡Cuéntanoslo!