Como deportista, una de las peores noticias que pueden ocurrir es la de enfrentarse a una lesión.
El saber de antemano que existirá una incapacidad física y un periodo de recuperación necesario antes de retomar actividades, puede ser desmotivante y preocupar a los atletas, quienes llevan un entrenamiento disciplinado pensado en progresar.
Aunque de primera mano una lesión podría parecer como una pausa o un retroceso en el rendimiento deportivo, no debe verse como un obstáculo insuperable.
Cuando la fisioterapia es la adecuada y el personal a cargo es especialista en el tema, el proceso permitirá la recuperación total de las lesiones con el objetivo de retomar la actividad física lo antes posible.
En algunos casos, incluso se podrá notar una capacidad de fuerza, cardíaca o neurológica mayor a la que se tenía previa a la lesión, cirugía o terapia.
¿Por qué pasa esto?
Al realizar actividad física, debemos tomar en cuenta que no solamente usamos nuestros músculos, tendones y ligamentos, sino también otros sistemas y órganos como pulmones, corazón, circulación, el sistema nervioso central y periférico.
Nuestro cuerpo funciona a partir de las señales que manda nuestro cerebro a las distintas partes del cuerpo.
Esto mismo afecta nuestra sensibilidad, habilidad y desarrollo para desarrollar ciertas actividades.
En el momento en el que cualquier persona inicia un proceso de rehabilitación lo que su cuerpo está haciendo es realizar la actividad que realizaba antes con una mejora en el rendimiento.
Por ello, en MOV Rehabilitación procuramos que cada uno de nuestros planes de rehabilitación sean un reto y compromiso diario.
De esta manera podemos garantizar la recuperación de lesiones y la evolución en el desempeño deportivo.